miércoles, 6 de mayo de 2009

Ensayando con el salmon

Me desperte el dia de ayer y como a la media veronica me molesto la luz por la ventana abierta, y mientras decido que hacer al despertar del todo, deseo borrar con la mano lo que ayer escribimos con el codo; Deseo saber que hacer cuando no sople mas el viento, deseo vivir una vida diferente cada dia, desearía distinguir el amor de cualquier otro sentimiento. Afuera el tiempo se consume, lo demas no importa, estan las turradas que nunca terminan y los amantes que se caminan con los ramos de flores; unos mas culpables que otros; Esta vez no habra flores en la tumba del pasado, esta vez no habra velas en la mesa de mi alcoba, la vida no tiene ninguna prisa y se rie muy poco. Los amantes no terminan, no cesan en sus intentos de acrecentar la subjetividad de sus vidas; Unos con flores, otros con globos, algunos con cansiones y los mas ingeniosos con palabras. Pero todos demostrando que el amor es el mas grande de los cielos. Por mi parte encerre mi alma lejos de los cielos, lejos de los hombres y cerca de los hoteles; la soledad de los cuartos y el peso de mi propia piel son mi mejor compañia en este dia tan extraño, tan desconocido y a la vez tan familiar a mis entrañas. Solo quiero el rose de una piel, como la fragancia de las flores dentro del burdel; Tan solo quiero esas despedidas que fatigan, que envejecen, que se borran con los dias. No hablo del mal del amor por las amarguras de mi alma, mas bien por las ataduras de mi calma, no hablo tampoco de lo desconocido pues soy un torero retirado de los ruedos; Mi retiro es puro y voluntario; Es necesario. Es como una carcel en la cual solo observo, analizo y escribo, protegido del dolor del llamado amor que sufre en si mismo por ser tan lejano de la naturaleza humana. Por eso con las nostalgias de mi alma quiero enborrachar mi corazon y borrar con otras bocas los antiguos besos de esa boca; Quiero alzar mi copa; Por aquella vieja obstinacion; Del amor que es tan solo flor de un día y que deja su aroma en nuestra estadía. Bajo el peso de las guillotinas yo te espero, te deseo y te anehelo, afectado por el sueño de los dias pasados y los restos del naufragio sufrido; Es verdad te quiero y no como lo hacen los demas te quiero con mi dinero y con mis ansias, mas alla del bien y el mal te espero; Tengo apenas media vida pero ya no espero mas que a tus silencios; y con tu calor, tu voz y tu lejania me enseñas que este dia si es para el amor que no se puede pagar... Pero, esta vez es mejor comprarlo hecho al amor.

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